Para 2034, se espera que los adultos mayores superen en número a los niños por primera vez en la historia de los Estados Unidos. Las necesidades de nuestra población que envejece están evolucionando, y un enfoque holístico que combine la salud, el bienestar y una mejor calidad de vida debe ser la máxima prioridad en la planificación y el diseño de los centros de atención para personas mayores.
La creación de un entorno saludable, activo y acogedor, con experiencias y servicios de alto nivel es la progresión futura para las instalaciones de vida independiente y asistida.Diseñar teniendo en cuenta la calidad del ambiente interior (IEQ) y la calidad del aire interior (IAQ) es fundamental en todos los tipos de espacios para personas mayores.
La investigación y la experiencia muestran que el entorno construido afecta directamente la salud de los ocupantes. A medida que las personas envejecen, se vuelven más inmunocomprometidas y más sensibles a los cambios de temperatura y luz, además de que necesitarán ayuda con la inteligibilidad y comprensión del habla si los espacios son demasiado ruidosos.
Ya sea que diseñe una renovación o una nueva construcción, puede comenzar por el plafón para rodear a los residentes con productos saludables, sustentables y estéticos que marquen la diferencia en los entornos de vida de las personas mayores.